El grueso de las canciones del disco nacieron durante la estancia en solitario de PAU GUILLAMET en el monasterio cisterciense de Poblet, una semana en el rigor de la clausura y el voto de silencio. En la soledad de la Torre Reial, en la sala gótica de música, grabó ascéticamente las primeras tomas, acompañándose de la guitarra y aprovechando la reverberación natural. Estas grabaciones primigenias conforman la base sonora del disco y le confieren su espíritu etéreo, en ocasiones fantasmagórico.
Pickpocket-2018
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